martes, 29 de junio de 2010

El por qué de su venganza

Todo final tiene su principio, y mi comienzo es éste.
Quizá alguien se esté preguntando la causa por la cual he decidido poner este nombre al blog: La venganza de la tierra.
Realmente, hay dos respuestas a tal pregunta.
La primera, es más sencilla: Uno de mis grupos de música preferidos -Desera- tiene una canción con este mismo título. A su vez, esta canción resulta ser una de mis favoritas, y por tanto, he pensado que sería una buena forma de empezar.
La segunda respuesta, es algo más larga, aunque también hace referencia a dicha canción.
A parte del título-como evidentemente se puede observar-, también me gusta su contenido, su razonamiento.
La canción habla sobre un tema con el que siempre me he visto muy implicada a nivel personal: ¿Por qué destruimos el planeta en el que vivimos? Es una pregunta que me hago a menudo. ¿Qué ganamos con semejante insensatez? Dinero, tal vez. Pero... ¿Realmente nos interesa el dinero? O... ¿El nivel de vida que podemos alcanzar gracias a él? ¡Já! Vida... Si seguimos a este paso, es decir; contaminando, matando a la tierra, matándonos a nosotros mismos, pisoteándonos los unos a los otros en vez de darnos la mano y ayudarnos a levantar de la caída... el dinero poco nos servirá si no tenemos en qué emplearlo.
Y lo peor, es que la tierra está aguantando demasiado. Creemos que no tiene límites, que puede aguantar cualquier tontería que se le pase por la cabeza a un americanito aburrido. Pero nos equivocamos, y mucho. La tierra ya está empezando a sollozar y su venganza se aproxima.
Lo peor es que ya poco podemos hacer por evitarla, hicimos lo que quisimos y ahora ella está en su mismo derecho...
Todo principio tiene su final, y el suyo es éste.



"Es un ser inerte al que podemos torurar: ¡ni llora, ni grita, ni puede sangrar! ¿Qué más da hacer desaparecer un bosque verde, si se mata a un ser vivo que no se defiende?"